El proceso de formación de dunas pioneras en Canet d´En Berenguer se ha visto favorecido en los últimos años por la presencia de barreras artificiales situadas a pocos metros de la orilla del mar. Estas, se constituyen en verdaderos obstáculos para la formación de los primeros montículos de arena. Su implantación ha contribuido enormemente a su desarrollo. Estas pequeñas dunas, son necesarias como paso previo a la formación de nuevas estructuras y también en la constitución de un ecosistema maduro.
Las barreras de las que hablamos permiten, no solamente que el ecosistema recupere su propia dinámica, sino también, su protección ante invasiones humanas. Hay que recordar que hablamos de una zona turística por excelencia en el litoral mediterráneo de la costa levantina y la afluencia de personas que frecuentemente la transitan, sobre todo en verano, es importante.
La ubicación de algunos carteles explicativos y de información en las entradas a la playa, son elementos indispensables en la consecución de los objetivos de concienciar sobre la importancia de este entorno.
Estacas situadas sobre dunas pioneras en un tramo
de las dunas de Canet d´En Berenguer.
Si nos fijamos detenidamente en el proceso de formación dunar, observaremos que es algo sencillo, que ocurre diariamente y que la presencia de nuevas estructuras de un día para otro, en el que el viento actúa, es una evidencia.
Entre las dunas pioneras y la orilla del mar existe una franja llamada Llanura o desierto mesolitoral. En él no se aprecia actividad vital alguna. Se trata de una zona de transición, donde la presencia de seres vivos es muy escasa, por no decir nula. Únicamente algún ejemplar de Cakile maritima (oruga marina) o Elymus farctus (grama) se encuentra de forma esporádica.
Alejándonos algo más de la orilla y continuando nuestro viaje hacia el interior del dominio terrestre, encontramos las dunas embrionarias. Suelen ser de un tamaño mayor que las pioneras y en ellas aparece una comunidad vegetal que se diferencia de las anteriores.
Las especies vegetales más representativas son:
1. Elymus farctus. (Grama).
2. Polygonum maritimum. (Corregüela marítima).
3. Calistegya soldanella. (Campanilla de mar).
Elymus farctus, empieza a desarrollar rizomas muy extendidas sobre toda la duna, de manera que el proceso de fijación es iniciado con ella. Es una planta que se confunde habitualmente con otra gramínea, Ammophila arenaria, a pesar de poseer características que nos permiten diferenciarlas claramente.
La grama es una planta que realiza funciones de sujeción importante para que este tipo de dunas queden ancladas y permitan el desarrollo de otras especies vegetales. Por decirlo de manera más sencilla, constituye un verdadero anclaje de las dunas de estas zonas.
Calystegia soldanella (campanilla de mar)
Sobre las dunas embrionarias encontramos en muchas ocasiones una especie “oportunista” .Se trata de Xanthium italicum (bardana menor). Se localiza en las zonas colindantes a las duchas y pasarelas de madera que dan entrada a la playa. Esta circunstancia es debida al acúmulo de agua que se produce en ellas de forma diaria.
En contacto con las embrionarias y algo más hacia el interior, aparecen las dunas móviles. Son llamadas así por la inestabilidad que presentan. Ello nos da idea de que estamos situados en una zona del ecosistema dunar, que no ha alcanzado el clímax ecológico. La presencia en esta zona de mayor cantidad de materia orgánica, hace posible la existencia de un mayor número de especies vegetales. Hemos llegado a un punto del cordón dunar, donde el tamaño de los montículos de arena es importante.
Formación de dunas móviles.
Sobre la duna móvil encontramos especies vegetales típicas como son:
1. Ammophila arenaria. (Barrón).
2. Echinophora spinosa (Zanahoria marina).
3. Eryngium maritimum (Cardo Marino).
4. Pancratium maritimum (Lirio de mar).
5. Euphorbia paralias (Lechetrezna marina Lirio de mar
La constante presencia de factores limitantes en toda la franja litoral hace que la presencia de las especies que lo habitan sea una auténtica odisea.
A saber:
No es fácil sobrevivir en un lugar donde el sustrato es arenoso, hay pocos nutrientes, la escasez hídrica es una constante, la salinidad del ambiente es diaria y las oscilaciones de temperatura frecuentes. Dicho esto, no es descabellado decir, que los seres vivos que habitan este ecosistema son verdaderos estrategas en la adaptación al medio para su supervivencia.
Es del todo curioso observar como el complejo dunar varía en cuanto a estructuras morfológicas de unos días a otros. Un hecho frecuente es el observar cambios en la geomorfología de esta zona, debido al cambio en la intensidad y frecuencia de los vientos que la azotan. Estos ejercen de forma constante su función modeladora del paisaje y son de diversa naturaleza, destacando: Garbí, Levante, Poniente, Tramontana etc.
Prosigamos en el estudio de las zonas que conforman las dunas de Canet d´En Berenguer. Para ello, avanzamos un poco más hacia tierra adentro. Es aquí donde advertimos la presencia de otro tipo de dunas, de coloración algo más parduzca y mayor cantidad de materia orgánica en el sustrato. Hemos llegado a las dunas semifijas y a las dunas fijas. Hay que señalar, que estas últimas geomorfologías no están presentes en el ecosistema dunar de Canet. Es incómodo hablar de la desaparición de las mismas por la presencia de infraestructuras derivadas de la mano del hombre: apartamentos, paseo marítimo, carreteras y vías de acceso, ocupan en la actualidad el trecho de costa que fue en su día, parte del ecosistema dunar.
En las dunas semifijas, la presencia de gramíneas como Ammophila arenaria van perdiendo importancia y se va produciendo una sustitución de estas por otras especies que soportan peor las condiciones de estrés a las que se ven sometidas aquellas que viven en las dunas móviles. En las playas de Canet d’En Berenguer las dunas semifijas han desaparecido casi completamente y en todo caso se confunden con las móviles en algún tramo.
Dentro de esta zona encontramos especies vegetales como:
1. Ononis natrix (Pegamoscas).
2. Helichrysum stoechas (Siempreviva).
3. Crithmum maritimum. (Hinojo Marino).
Pegamoscas
Como comentábamos anteriormente de las dunas fijas no queda rastro alguno. En su día constituyeron probablemente una zona estabilizada de este ecosistema, albergando gran cantidad de especies con las que hoy desgraciadamente, no contamos. Este nivel ecológico albergaría especies que requieren mayor aporte de materia orgánica que las anteriores para su supervivencia. La zona que ocuparían tendría mayor biodiversidad y las interacciones entre toda la biocenosis y su medio mayor en número. Para conocer mejor este tramo de dunas, debemos fijar la vista en la Devesa del Saler (junto a la Albufera de Valencia) donde si están representadas. Las especies que las constituyen son arbustivas, con tronco leñoso, y la presencia de especies arbóreas considerablemente abundantes.
Algunas especies comunes en esta zona de dunas fijas son:
1. Pistacia lentisco (Lentisco).
2. Sparagus acutifolius (Esparraguera).
3. Chamaerops humilis (Palmito).
4. Lonicera implexa (Madreselva).
5. Smilax aspera (Zarzaparrilla).
6. Quercus coccifera (Coscoja).
7. Pinus halepensis (Pino carrasco)
Este último nivel de dunas fijas, como citaba anteriormente, no se encuentra representado en Canet d´En Berenguer. Únicamente en los alrededores del faro de este municipio tenemos la oportunidad de observar unos ejemplares de pinos que podrían ser un reducto del mismo.
Desconocemos si antiguamente existieron escenarios típicos de las zonas litorales de la comunidad valenciana como albuferas, malladas y saladares. La presencia de estos últimos en zonas cercanas de la playa de Sagunto, parece indicar que pudieron existir también en Canet d´En Berenguer.
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